“No podemos hacer el trabajo de hoy con los métodos de ayer y estar en el negocio del mañana”. Se cae de maduro, ¿verdad? Pues son pocas las empresas que tienen esta frase integrada en su ADN, que hacen apuestas decididas por salir de su zona de confort porque entienden que lo único que tienen ganado es el hoy.
Estas empresas entienden a la perfección que liderar con éxito un proyecto empresarial depende de variables en constante movimiento e interrelacionadas que hay que saber leer e interpretar y empujan a la organización a mover ficha hacia delante de manera constante.
No salen de su zona de confort porque el mercado les obliga a salir de ese estado de adormilamiento, de complacencia, del “esto siempre se ha hecho así”; son organizaciones proactivas que entienden que Crear Valor no es necesariamente lo mismo que Trabajar.
Las empresas que han sobrevivido a la crisis tienen que empezar a operar dentro de este marco de referencia, replantearse su estrategia, focalizar su negocio en aquello en lo que realmente son brillantes, actualizar su propuesta de valor integrando la tecnología y focalizando la organización en lo que realmente importa teniendo en cuenta que el esfuerzo es fundamental pero lo que valen son los resultados.
Es hora de desterrar el miedo como facilitador de un clima laboral controlado (“esto no lo digo/planteo/ hago, no vaya a ser que me echen”) porque esa aparente calma, no deja de ser sino una calma chicha, donde estamos retrocediendo pasos en creatividad, innovación y calidad y por ende, perdiendo nuestra posición competitiva en el mercado. ¿No es un precio demasiado alto?
El miedo nos paraliza, aprender arriesgarse no lo tenemos integrado en nuestra cultura